Unos a otros
Mientras esperaba para entrar en una de las atracciones populares de Disneyland, noté que la mayoría de la gente hablaba y sonreía, en lugar de quejarse por la larga espera. Esto hizo que me preguntara qué hacía que esperar en aquel lugar fuera una experiencia agradable. Al parecer, la clave era que casi nadie estaba allí solo, sino que amigos, familiares, grupos y parejas compartían la situación, lo cual era muy distinto a estar esperando sin compañía.
Gigantes en la tierra
Después de acampar durante dos años al pie del monte Sinaí, los israelitas estaban a punto de entrar en Canaán, la tierra que Dios había prometido darles. El Señor les dijo que enviaran doce espías para reconocer la tierra y a sus habitantes. Al volver, diez de ellos dijeron que no podrían entrar, pero dos afirmaron que podían.
Obsesión con comparar
Uno de los profesores de la Universidad de Harvard ha descubierto una tendencia preocupante entre sus alumnos y colegas: obsesión con comparar. Escribe: «Más que nunca, […] los ejecutivos de negocios, los analistas de Wall Street, los abogados, los médicos y otros profesionales están obsesionados con comparar sus logros con los de los demás. […] Esto es perjudicial para las personas y para las empresas. Cuando defines el éxito según parámetros externos en lugar de personales, la satisfacción y el compromiso disminuyen».
Eso que tú haces
Cuando el convoy estaba por partir, un joven soldado golpeó apresurado la ventanilla del vehículo de su jefe de pelotón. Irritado, el sargento bajó la ventanilla y gritó: —¡¿Qué pasa?!
Con un poco de ayuda
El verano de 2015, Hunter (de 15 años) llevó en brazos a su hermano Braden (de 8) unos 90 kilómetros para que la gente tomara conciencia de las necesidades de quienes padecen parálisis cerebral. Braden pesa 27 kilos, así que Hunter tuvo que detenerse varias veces para descansar, mientras otros lo ayudaban a estirar los músculos. Aunque usaba arneses especiales para ayudarlo a soportar el dolor físico, Hunter dice que lo más alentador era la gente en el camino: «Me dolían las piernas, pero mis amigos me levantaban y podía seguir». La madre de estos muchachos llamó la ardua caminata «El paso decidido de la parálisis cerebral».
Llevar luz a la oscuridad
En 1989, Vaclav Havel pasó de ser prisionero político a convertirse en el primer presidente electo de Checoslovaquia. Años después, en su funeral en Praga, en 2011, la ex Secretaria de Estado de los Estados Unidos, Madeleine Albright, nacida en Praga, lo describió como alguien que había «llevado la luz a sitios de profunda oscuridad».
El legado de una vida
Mientras me hospedaba en un hotel de un pequeño pueblo, noté que había movimiento en la iglesia al otro lado de la calle. La gente estaba apretujada dentro del edificio, en tanto que otro grupo de jóvenes y ancianos llenaba la acera. Cuando vi un coche fúnebre en la esquina, me di cuenta de que era un funeral. Como había tanta gente, supuse que se trataba de algún héroe local; quizá un empresario acaudalado o alguien famoso. Por curiosidad, le dije al empleado del hotel: «¡Cuántos concurrentes para un funeral! Seguro que es alguien muy conocido del pueblo».
Tu Padre sabe
T enía solo cuatro años y estaba acostado junto a mi padre sobre una alfombra en el suelo durante una calurosa noche de verano. (En esa época, mi madre tenía su propia habitación porque había tenido un bebé). Estábamos en el norte de Ghana, donde el clima es mayormente seco. El sudor me cubría el cuerpo y el calor me secaba la garganta. Tenía tanta sed que desperté a mi padre. En medio de aquella noche seca, él se levantó y tomó agua de una jarra para darme de beber. Durante toda mi vida, tal como en aquella noche, él fue un modelo de padre protector. Siempre me proveía lo que yo necesitaba.
Cuando no entendemos
A unque dependo diariamente de la tecnología para trabajar, no entiendo mucho cómo funciona. Enciendo la computadora, abro un documento Word y me pongo a escribir. De todos modos, mi incapacidad para entender cómo trabajan los microchips, los discos duros, las conexiones de Internet y las pantallas a todo color no impide que me beneficie de los avances tecnológicos.
Moldear el pensamiento
En esta era digital, se cumple la frase acuñada por el visionario Marshall McLuhan en 1964: «El mensaje está en los medios». Cuando las computadoras y los teléfonos celulares eran aún ciencia ficción, él predijo cómo influirían las comunicaciones en nuestra manera de pensar. Nicholas Carr explica que Internet está modelando el proceso de pensamiento y reduciendo la capacidad de concentración y reflexión. La información en línea penetra lentamente como una corriente de partículas.