El secreto de satanás - Noveno día
Porque mayor es el que está en vosotros que el que está en el mundo. - 1 JUAN 4:4
Lectura bíblica para hoy: Romanos 6:14-23
Un instructor de conducción de vehículos en Alemania fue detenido por la policía después de un accidente de poca importancia con un camión. Cuando le pidieron la licencia de conducir, no la tenía. Había estado enseñando a conducir…
Cuatro formas de mirar
Mientras luchaba con algunas situaciones difíciles con sus hijos, Juana se sentó en la reunión de alabanza. Exhausta, tenía ganas de «renunciar» a su papel de madre. Las cuatro reflexiones que escuchó esa mañana la ayudaron a seguir adelante:
No hay marcha atrás
No pude deshacer mis acciones. Una mujer había estacionado su auto y me impedía llegar al surtidor de combustible. Se bajó a dejar algunos objetos para reciclar y, como yo no tenía ganas de esperar, hice sonar la bocina. Irritada, retrocedí y di la vuelta por otro lado. De inmediato, me sentí mal por ser impaciente y no querer esperar treinta segundos (como mucho) a que avanzara. Le pedí perdón a Dios. Sí, la mujer tendría que haber estacionado en el lugar designado, pero yo podría haber mostrado bondad y paciencia en lugar de dureza. Por desgracia, ya era demasiado tarde para disculparme… la mujer se había ido.
El evento principal
Mientras miraba una exhibición de fuegos artificiales durante una celebración en la ciudad donde vivo, me distraje. Hacia ambos lados del evento principal, se veían ocasionalmente destellos de fuegos más pequeños. Eran bonitos, pero hicieron que me perdiera de disfrutar la exhibición más espectacular que estaba justo arriba de mi cabeza.
Visión nublada
Tengo una amiga que es una jinete experimentada, y me ha enseñado algunas cosas interesantes sobre los caballos. Por ejemplo: a pesar de ser el mamífero terrestre de ojos más grandes, ve poco y distingue menos colores que los seres humanos. Por eso, a veces, le cuesta identificar objetos en el suelo. Cuando ve un tronco, no sabe si puede saltarlo fácilmente o si es una serpiente grande que podría lastimarlo. Entonces, si no está bien entrenado, se asusta fácilmente y tiende a escapar.
Visión nublada
Tengo una amiga que es una jinete experimentada, y me ha enseñado algunas cosas interesantes sobre los caballos. Por ejemplo: a pesar de ser el mamífero terrestre de ojos más grandes, ve poco y distingue menos colores que los seres humanos. Por eso, a veces, le cuesta identificar objetos en el suelo. Cuando ve un tronco, no sabe si puede saltarlo fácilmente o si es una serpiente grande que podría lastimarlo. Entonces, si no está bien entrenado, se asusta fácilmente y tiende a escapar.
Candados del amor
Los «candados del amor» son un fenómeno creciente. Miles de personas enamoradas han colocado estos candados en puentes, puertas y cercas en todo el mundo. Las parejas graban sus nombres en ellos y los colocan en lugares públicos como un símbolo de su amor eterno. A algunas autoridades no les gusta debido al peligro que pueden generar si se colocan demasiados. Algunos piensan que son actos vandálicos, mientras que otros los consideran obras artísticas hermosas y cuadros del compromiso del amor.
El buen corazón de Dios
Rogelio había atravesado muchas dificultades. Lo operaron del corazón para reparar una válvula. Un par de semanas después, tuvo que volver al quirófano debido a unas complicaciones. Cuando empezaba a mejorarse con terapia física, tuvo un accidente en su bicicleta y se fracturó la clavícula. Como si eso fuera poco, la muerte de su madre le rompió el corazón. Como consecuencia, se desanimó tremendamente. Cuando un amigo le preguntó si había visto a Dios obrar de algún modo, confesó que no.
Vengan a mí
Cuando Jesús vivió en este mundo, invitaba a la gente a ir a Él, y hoy sigue haciendo lo mismo (Juan 6:35). Pero ¿qué tienen Él y su Padre celestial que nosotros necesitemos?
La oveja que falta
Laura cargó una cabra y una oveja prestadas en un camión para llevarlas a la iglesia al ensayo de una obra en vivo de Navidad. Los animales se pelearon y se acosaron por un rato, y, después, se calmaron. Laura partió para la iglesia, pero tuvo que detenerse a cargar combustible.