Lágrimas de gratitud
En una reunión de la Cena del Señor a la que asistimos con mi esposa, se invitó a la congregación a pasar al frente a recibir el pan y la copa de mano de uno de los pastores o ancianos. Le hablaron a cada uno sobre el sacrificio de Jesús por ellos. Fue una experiencia conmovedora, durante un momento que a veces puede volverse rutinario. Cuando regresamos a nuestros asientos, observé cómo otros iban pasando lentamente y en silencio. Fue impactante ver cuántos volvían con lágrimas en los ojos. Para mí y para otros con los que hablé después, eran lágrimas de gratitud.
Preguntas inquisitivas
Mientras viajaba en un tren, pocos años después de la guerra civil en los Estados Unidos, el general Lew Wallace se encontró accidentalmente con un colega del ejército, el coronel Robert Ingersoll. Este era uno de los agnósticos más notorios del siglo xix, y Wallace era un hombre de fe. Cuando la conversación entre ambos se centró en sus diferencias espirituales, el general se dio cuenta de que era incapaz de responder a las preguntas y las dudas del coronel. Avergonzado por su falta de conocimiento sobre su fe, Wallace empezó a escudriñar las Escrituras para hallar las respuestas. El resultado fue su exposición de la persona del Salvador en su clásica novela histórica Ben Hur: Una historia del Cristo.
Identidad equivocada
Scott, mi hermano menor, nació cuando yo estaba en el último año de la escuela secundaria. Esta diferencia de edad generó una situación interesante cuando llegó el momento de que él fuera a la universidad. Nuestra mamá y yo lo acompañamos cuando viajó por primera vez a conocer las instalaciones donde se quedaría. Cuando llegamos, la gente pensó que éramos el padre y la abuela de Scott Crowder. Al final, nos cansamos de explicar que no era así. Independientemente de lo que dijéramos o hiciéramos, los vínculos correctos eran dejados de lado por este cómico caso de identidad equivocada.
Tienes un amigo
Una de las consecuencias irónicas del arrollador crecimiento de los medios de comunicación social es que, a menudo, nos aislamos cada vez más. Un artículo de Internet advierte: «Los que se oponen a llevar una vida primordial o exclusivamente en Internet sostienen que los amigos virtuales no sustituyen en forma adecuada a los de la vida real, y que […] los individuos que reemplazan con amigos virtuales los de carne y hueso se vuelven aun más solitarios y depresivos que antes».
Testigo amable
Hace años, caí de un puente de unos once metros de altura y, como mi vida corría peligro, me internaron en un hospital. Mientras estaba allí, la esposa del hombre de la cama de al lado se detuvo para hablar conmigo: «Mi esposo acaba de contarme lo que te sucedió. No tenemos duda de que Dios te protegió porque desea utilizarte. Hemos estado orando por ti».
Tendencia a desviarse
Uno de mis himnos favoritos es «Fuente de vida eterna», escrito en inglés en 1757 por Robert Robinson cuando tenía 22 años. Una parte de la letra (en traducción libre) siempre me llama la atención y me obliga a examinarme: Propenso a vagar, Señor, yo me siento, propenso a dejar al Dios que amo. A veces, me siento así. Y con demasiada frecuencia, me distraigo y deslizo, en lugar de mantener el corazón y la mente enfocados en el Salvador que me ama y se entregó por mí. Robert Robinson y yo no somos los únicos a quienes les pasa esto.
Traducción fiel
A través de los años, he tenido oportunidad de enseñar de la Biblia a muchas personas en todo el mundo. Como solamente hablo inglés, suelo trabajar con intérpretes que pueden tomar las palabras de mi corazón y traducirlas al idioma de los oyentes. La comunicación eficaz depende totalmente de la habilidad de estos traductores. Ya sea que se trate de Inawaty en Indonesia, Annie en Malasia o Jean en Brasil, ellos se aseguran de que el significado de mis palabras se exprese claramente.
Manantial de vida
En el norte de Michigan, en Estados Unidos, hay una maravilla de la naturaleza: un lago de unos 12 metros de profundidad y 90 metros de ancho. Los aborígenes lo llamaban «Kitch-iti-kipi» o «la gran agua fría», conocido hoy como The Big Spring. Nace de corrientes subterráneas que impulsan cerca de 40.000 litros de agua por minuto entre las rocas hacia la superficie. Además, la temperatura del agua se mantiene constante en unos 7 ºC, lo que hace que no se congele ni siquiera durante los brutales inviernos helados de esa región. Los turistas pueden disfrutar viendo esas aguas durante todo el año.
El poder de la música
En Gales, la música de grupos corales masculinos está profundamente arraigada en la cultura. Antes de la Segunda Guerra Mundial, había un coro galés que tenía una rivalidad amistosa, pero competitiva, con un coro alemán, pero ese vínculo fue sustituido por rencor durante y después de la guerra. No obstante, la tensión fue superada gradualmente por el mensaje grabado en el trofeo que compartían ambos grupos: «Habla conmigo y eres mi amigo. Canta conmigo y eres mi hermano».
Se necesita guía
La iglesia de San Nicolás, en Galway, Irlanda, tiene una larga historia y un presente dinámico. Es la iglesia más antigua de ese país y proporciona guía de una manera sumamente práctica. El edificio sobresale en altura del resto de la ciudad y los capitanes de los barcos utilizan su campanario como guía para navegar y entrar a salvo en la bahía. Durante siglos, esta iglesia les ha indicado a los marineros el camino seguro a casa.