Un nuevo corazón en Cristo
Brock y Dennis eran amigos de la infancia, pero cuando crecieron, Brock mostró poco interés en la fe de Dennis en Jesús. Dennis amaba a su amigo y oraba por él porque sabía que iba en un camino descendente de oscuridad y depresión. Al orar, adaptó las palabras del profeta Ezequiel: «Por favor, Dios, quita de Brock un corazón de piedra y dale uno de carne» (ver Ezequiel 11:19). Anhelaba que su amigo anduviera en el camino de Dios.
Lugar espacioso de Dios
Cuando al teólogo Todd Billings le diagnosticaron un cáncer incurable, describió su mortalidad inminente como luces en habitaciones distantes que titilaban o se apagaban. «Como padre de niños de uno y tres años, tendía a pensar en las siguientes décadas como una extensión amplia, suponiendo que vería a Neti y Nathaniel crecer y madurar […]. Pero al recibir el diagnóstico […], se está produciendo una reducción».
Temor reverente
Jeremías escribe: «Sé un poco sobre el temor a morir. Hace siete años […], me sentí descompuesto, mareado, lleno de miedo cuando me dijeron que tenía un cáncer incurable». Pero aprendió a manejar su temor al descansar en la presencia de Dios, y pasar del temor a la muerte al temor reverente a Él. Para Jeremías, esto significa estar maravillado ante el Hacedor del universo quien «destruirá a la muerte» (Isaías 25:8), y al mismo tiempo, entender en lo profundo de su interior que Él lo conoce y lo ama.
La mano de Dios
En 1939, ante el reciente comienzo de la guerra para Gran Bretaña, en su discurso de Navidad transmitido por radio, el rey Jorge vi procuró alentar a los ciudadanos del Reino Unido y la Comunidad Británica de Naciones a confiar en Dios. Citó un poema que le encantaba a su madre: «Sal a la oscuridad y pon tu mano en la mano de Dios. / Eso te será mejor que la luz y más seguro que un camino conocido» (trad. lit.). El rey no sabía qué traería el nuevo año, pero confiaba en que Dios los guiaría y sostendría en los días difíciles que se avecinaban.
Amor tangible
Mientras estaba sentada junto a la cama de mi amiga Margaret en el hospital, observé el trajín de los otros pacientes, del personal médico y de las visitas. Una joven que estaba sentada cerca, junto a su madre enferma, le preguntó a Margaret: «¿Quiénes son todas estas personas que te visitan todo el tiempo?». Ella respondió: «¡Son miembros de la familia de mi iglesia!». La joven remarcó que nunca había visto algo así; que sentía que tantas visitas eran «expresiones tangibles de amor». Margaret respondió sonriendo: «¡Todo se reduce a nuestro amor a Dios a través de su Hijo Jesucristo!».
Nueva vida en Jesús
Mientras crecían juntos en Asia Central, Baheer y Medet eran íntimos amigos. Pero, cuando Baheer creyó en Jesús, todo cambió. Medet lo denunció a las autoridades gubernamentales, y Baheer fue terriblemente torturado. El guardia gruñó: «Esta boca nunca volverá a pronunciar el nombre de Jesús». Aunque sangraba muchísimo, Baheer alcanzó a decir que podrían impedirle hablar de Cristo, pero que nunca podrían cambiar lo que Él había hecho en su corazón.
Mantequilla untada
En el libro de J. R. R. Tolkien, La comunidad del anillo, Bilbo Bolsón comienza a mostrar los efectos de llevar durante seis décadas un anillo mágico con poderes oscuros. Abrumado por su naturaleza corrosiva, le dice al mago Gandalf: «Me siento frágil, disperso como mantequilla untada sobre demasiado pan». Decide dejar su casa en busca de descanso, algún lugar donde estar «en paz y tranquilo, sin un montón de parientes merodeando».
Reflexionar en el carácter de Dios
Tras un período de servicio difícil en Afganistán, Scott, un sargento del ejército británico, colapsó. Recordaba: «Estaba en un lugar oscuro». Pero cuando descubrió a Jesús y comenzó a seguirlo, su vida cambió radicalmente. Ahora procura hablarles a otros del amor de Cristo; en especial, a veteranos con quienes compite en las Juegos Invictus, un evento internacional para miembros y veteranos enfermos o heridos de las fuerzas armadas.
Búsqueda y rescate
Unos amigos salieron a navegar por el Canal de la Mancha, con la esperanza de que el pronóstico de tormentas cambiara. Pero el viento aumentó y el mar se picó, poniendo en peligro la embarcación. Entonces, pidieron ayuda por radio a la RNLI (Real Institución Nacional de Botes Salvavidas). Después de momentos tensos, vieron a lo lejos a sus rescatadores y supieron, aliviados, que pronto estarían a salvo. Agradecido, mi amigo reflexionó: «Aunque la gente ignore las reglas del mar, la RNLI igual viene al rescate».
Aferrarse a Dios
Cuando Joni Eareckson Tada habla de Rika, destaca la «profunda y probada fe en Dios de su amiga» y la perseverancia que ha desarrollado al vivir en un estado de debilidad crónica. Por más de 15 años, Rika ha estado postrada, sin siquiera la posibilidad de ver la luna desde la pequeña ventana de su habitación. Pero no ha perdido la esperanza; confía en Dios, lee y estudia la Biblia, y como Joni lo describe: «Ella sabe cómo permanecer firme durante las duras batallas contra el desánimo».