Oportunidades de brillar
En marzo de 2020, mientras paseaba su perro por el Central Park en Nueva York, Whitney, un experto en finanzas jubilado, vio camiones y tiendas blancas con una cruz y el nombre de una organización benéfica que no conocía. Cuando supo que el grupo estaba construyendo un hospital de campaña para enfermos de COVID-19, preguntó si podía ayudar. Durante semanas, a pesar de las diferencias políticas y religiosas, él y su familia colaboraron en todo lo que podían. Whitney declaró: «Cada persona que conocí fue auténticamente agradable». Y elogió que nadie cobraba por ayudar a su ciudad en un momento de enorme necesidad.
Mi formadora
Cuando tenía siete años, a Thomas Edison no le gustaba la escuela y le iba mal. Un día, un maestro incluso dijo que estaba mentalmente confundido. Al día siguiente, después de hablar con ese maestro, su mamá, también educadora, decidió enseñarle en casa. Con el amor y el aliento de su madre (además del genio dado por Dios), Thomas llegó a ser un gran inventor. Más tarde, escribió: «Mi madre fue mi formadora. Era tan sincera, tan segura de mí; y yo sentía que tenía a alguien por quien vivir, alguien a quien no debía decepcionar».
¿Quién es Jesús?
¿Quién cree la gente que es Jesús? Algunos dicen que era un buen maestro, pero tan solo un hombre. C. S. Lewis escribió: «O este hombre era, y es, el Hijo de Dios, o de lo contrario, era un loco o algo peor. Puedes hacerlo callar como a un necio, puedes escupirlo y llamarlo un demonio, o puedes caer a sus pies y llamarlo Señor y Dios. Pero no nos inventemos alguna tontería arrogante y digamos que fue un excelente maestro humano». Estas conocidas palabras de Mero cristianismo proponen que Jesús no habría sido un gran profeta si hubiera afirmado falsamente que era Dios. Esa sería la mayor herejía.
El mensaje de la cruz
Tal como él lo expresa, Zhang se crio «sin Dios, ni religión ni nada». En 1989, buscando libertad para su pueblo, ayudó a liderar a estudiantes en una protesta pacífica, pero, trágicamente, eso llevó a que interviniera el gobierno y se perdieran muchas vidas. Por participar, lo incluyeron en la lista de las personas más buscadas. Luego de un breve encarcelamiento, huyó a una aldea lejana donde conoció a una anciana que le presentó el evangelio. Ella tenía una copia manuscrita del Evangelio de Juan, pero no sabía leer, así que le pidió a Zhang que le leyera. Mientras él leía, ella le explicaba; y al año, él creyó en Jesús.
Sin necesidad de una fórmula
Cuando Julia era joven, su bienintencionada maestra de escuela dominical entrenó a la clase para evangelizar, lo cual incluía memorizar versículos y una fórmula para compartir el evangelio. Con una amiga, lo probaron nerviosamente con otra amiga, temiendo olvidar un versículo o paso importante. Julia no recuerda si esa tarde concluyó con una conversión, pero supone que no. El enfoque pareció ser más dirigido a la fórmula que a la persona.
Nunca digas «no puedo»
Jana nació sin piernas y abandonada en un hospital. Sin embargo, dice que ser dada en adopción fue una bendición. «Estoy aquí por las personas que se volcaron a mí». Su familia adoptiva la ayudó a ver que había «nacido así por una razón». Le enseñaron a «nunca decir “no puedo”» y la alentaron en todos sus emprendimientos… ¡incluido convertirse en una acróbata y trapecista talentosa! Su actitud ante los desafíos es: «¿Cómo enfrento esto?», y motiva a otros a hacer lo mismo.
Oscuridad y luz
Sentada en un tribunal, fui testigo de varios ejemplos de nuestro mundo roto: una hija separada de su madre, una pareja que había perdido el amor y ahora solo compartían amargura; un esposo que anhelaba reconciliarse con su esposa y volver a ver a sus hijos. Necesitaban desesperadamente sanar las heridas de su corazón y que prevaleciera el amor de Dios.
Esforzado y valiente
Diet Eman era una joven holandesa, tímida y común y corriente —enamorada, con trabajo, y disfrutando de su familia y amigos—, cuando los alemanes invadieron su país en 1940. Tiempo después, Diet escribió: «Cuando el peligro está a tu puerta, quieres actuar casi como un avestruz que mete la cabeza en la arena». Sin embargo, ella sintió que Dios la llamaba a arriesgar su vida para buscar dónde esconder a judíos y a otras personas perseguidas. Esta sencilla joven se convirtió en una guerrera esforzada y valiente para Dios.
Un nuevo llamamiento
Carlos y su pandilla robaban casas, autos y tiendas, y peleaban con otras pandillas. Finalmente, Carlos fue arrestado y sentenciado. En la cárcel, se convirtió en «mandamás», alguien que repartía cuchillos caseros durante los disturbios.
Llevado a través de la tormenta
En su primer viaje a la India en 1830, el misionero escocés Alexander Duff naufragó frente a la costa de Sudáfrica. Él y el resto de los pasajeros llegaron a una isla desolada; y poco después, un miembro de la tripulación encontró un ejemplar de la Biblia que había llegado a la playa. Duff les leyó el Salmo 107 a los sobrevivientes, y cobraron ánimo. Tras un rescate y otro naufragio, Duff llegó a India.