¿La Navidad perfecta?
Lectura de hoy: Lucas 2:1-7, 15-20
Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón. -Lucas 2:7
Una Navidad, mientras estaba de compras, entré en una tienda con un enorme cartel que decía: «La Navidad perfecta». Supongo que la idea era que, si comprabas los regalos allí, te garantizarían unas Navidades perfectas. A todos nos gustaría tener unas Navidades «perfectas», pero ¿a qué se parece eso? ¿Estamos pensando en nuestra felicitación, película o villancico favorito?
Si pensamos en la primera Navidad, encontramos a una humilde pareja que había viajado muchos kilómetros desde Nazaret hasta Belén para cumplir con un censo.
«Y aconteció que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento. Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón» (Lucas 2:6-7).
El primer lecho de Jesús fue un pesebre o comedero para animales. Los huéspedes que ayudaron a recibir al recién nacido eran pastores marginados en aquella sociedad (vv. 15-16). No suena demasiado perfecto, ¿verdad?
Lo perfecto de la Navidad es la venida de Jesús a la tierra para salvarnos de nuestros pecados. «Que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor» (v. 11). No nos dejemos atrapar por el comercialismo de esta época, sino recordemos que la Navidad trata de Cristo. Jesús, que es perfecto, vino a nuestro mundo imperfecto para ofrecernos paz y salvación de nuestros pecados.
Nancy Gavilanes
¿Cómo es para ti la Navidad perfecta? ¿Cómo puedes celebrar a Cristo esta Navidad?
Querido Jesús, gracias por venir y redimirme.
Dios nos ama tanto que envió a Jesús para salvarnos y estar con nosotros, hoy y siempre.
Esta Navidad, enfoca tu celebración en la promesa del nacimiento de Cristo con Dios está con nosotros: 10 reflexiones navideñas de Nuestro Pan Diario. Sumérgete en cada breve devocional, diseñado para inspirarte a abrazar las promesas de la constante presencia de Dios y reflexionar sobre las innumerables formas en que Él está a tu lado.