El pan que satisface
Memoricé el Padrenuestro cuando iba a la escuela primaria. Cada vez que decía la frase «el pan nuestro de cada día, dánoslo hoy» (Mateo 6:11), no podía evitar pensar en el pan que pocas veces teníamos en mi casa. Solo cuando mi padre volvía de viajar a la ciudad, había pan. Por eso, orar a Dios por pan para todos los días era muy importante para mí.
Nunca se olvida
Durante la celebración de los 50 años de su madre, ante la presencia de cientos de personas, Kukua, la hija primogénita, relató lo que su progenitora había hecho por ella. Recordaba que habían sido tiempos difíciles y los recursos en el hogar escaseaban. No obstante, su madre soltera se privó de comodidades personales, y vendió sus joyas y otros bienes para que ella pudiera estudiar. Con lágrimas en los ojos, declaró que su madre nunca la había abandonado, ni a ella ni a sus hermanos, a pesar de lo difícil que era todo.
El andar del camaleón
Cuando pensamos en el camaleón, quizá nos viene a la mente su capacidad para cambiar de color según el entorno. Pero también tiene otra característica interesante. En ocasiones, los he observado caminar y me he preguntado cómo llegan a destino: de mala gana, estiran una pata, parecen cambiar de idea, lo intentan otra vez; entonces, apoyan vacilantes la pata, como si temieran que el suelo fuera a hundirse. Por eso, me causó gracia cuando escuché decir: «No seas como un miembro camaleón en la iglesia, que se excusa: “Hoy voy a la iglesia; no, voy la semana que viene; no, ¡mejor espero un poco!”».
En transición
En Ghana, es costumbre que la gente ponga avisos fúnebres en carteleras o paredes de cemento. Frases como Partió demasiado pronto, Celebración de vida y ¡Qué golpe duro! anuncian la muerte de seres queridos y sus funerales. Uno decía: En transición, indicando que hay vida después de la muerte.
El momento de irse
Cuando mi padre se convirtió al cristianismo, siendo ya anciano, me fascinó su plan para vencer la tentación. A veces, simplemente, ¡se marchaba! Por ejemplo, cuando un desacuerdo entre él y un vecino empezaba a convertirse en una pelea, se alejaba para no ser tentado a seguir peleando.
Reenviar a Dios
Cuando no existían los teléfonos, los emails ni los celulares, el telegrama era el medio de comunicación más veloz. Aun así, solo las noticias importantes se enviaban de ese modo, y, por lo general, eran malas.
Cómo envejecer
«¿Cómo estás hoy?», pregunté sin pensar. Mi amiga de 84 años susurró, señalando los dolores en sus articulaciones: «La vejez es difícil», y añadió seriamente: «pero Dios ha sido bueno conmigo».
Escrito en nuestro corazón
En mi vecindario, abundan las inscripciones religiosas: en placas, paredes, puertas, vehículos comerciales e, incluso, en nombres de negocios. Puede leerse Por la gracia de Dios en un autobús; y El favor divino en el cartel de una librería. El otro día, no pude evitar sonreír al leer detrás de un Mercedes Benz: Tome distancia… ¡ángeles en guardia!
Un líder servicial
En las sociedades africanas tradicionales, la sucesión al liderazgo es una decisión importante. Cuando un rey muere, se selecciona con gran cuidado al próximo soberano. Además de ser de la familia real, el sucesor tiene que ser fuerte, valiente y sensible. No solo debe ser alguien que lidere, sino que también lo haga con una actitud servicial.
Refugio verdadero
En marzo de 2014, se desató un conflicto tribal en la zona donde nací, lo cual obligó a mi familia y otros refugiados a resguardarse cerca de la ciudad capital. A lo largo de la historia, infinidad de personas que se sintieron inseguras en sus tierras viajaron a otros lugares para encontrar protección y una vida mejor.