La belleza de la adopción
La película Un sueño posible cuenta la historia real de Michael Oher, un adolescente sin hogar. Una familia lo recibe en su casa y lo ayuda a superar dificultades en el aprendizaje y a lograr la excelencia en el fútbol americano. En una escena, la familia habla con Michael sobre la posibilidad de adoptarlo, después de haber estado viviendo con ellos varios meses. Michael responde que ¡ya se consideraba parte de la familia!
Jesús es nuestra paz
El monje Telémaco vivió una vida tranquila, pero su muerte a finales del siglo iv cambió el mundo. Visitando Roma, saltó la pared a la arena del anfiteatro para intentar detener a los gladiadores que participaban de aquel sangriento deporte, para que no se mataran; pero la multitud descontrolada lo apedreó hasta matarlo. No obstante, el emperador Honorio se conmovió ante su actuar y decretó el final de la práctica de esos juegos de 500 años de antigüedad.
Él nos oye
El presidente de los Estados Unidos Franklin D. Roosevelt solía saludar a gente en largas filas en la Casa Blanca. La historia dice que se quejaba de que nadie prestaba atención a lo que decía. Entonces, decidió hacer un experimento. A todos los que pasaban para darle la mano, les decía: «Esta mañana asesiné a mi abuela». Los invitados respondían con frases como: «¡Maravilloso! Siga con su buen trabajo. Dios lo bendiga». Solo al llegar al final de la fila y saludar al embajador de Bolivia, este escuchó lo que dijo, a lo que respondió perplejo: «Estoy seguro de que se lo merecía».
Escuchar el consejo sabio
Durante la Guerra Civil Estadounidense, el presidente Abraham Lincoln, queriendo complacer a un político, emitió una orden respecto al ejército que el secretario de guerra Edwin Stanton rehusó llevar a cabo. Dijo que el presidente era un tonto. Cuando le comentaron a Lincoln, este respondió: «Si Stanton dijo que soy un tonto, debe ser cierto porque casi siempre tiene razón. Veré si es cierto». Cuando hablaron, el presidente se dio cuenta enseguida de que su decisión era un grave error, y la retiró de inmediato. Lincoln demostró sabiduría al no empecinarse; consideró el consejo y cambió de idea.
Aprender de la necedad
Un hombre entró en una tienda, puso un billete de 20 dólares en el mostrador y pidió cambio. Cuando el empleado abrió la caja registradora, el hombre sacó una pistola y pidió todo el dinero que había en la caja. Se llevó el efectivo y salió corriendo, dejando atrás el billete de 20 dólares sobre el mostrador. ¿Cuánto dinero se llevó de la caja? Quince dólares.
Conocer al Padre
Según una leyenda, una vez, el conductor británico Sir Thomas Beecham vio a una mujer de aspecto distinguido en el salón de un hotel. Creyendo que la conocía pero sin poder recordar su nombre, se detuvo para hablar con ella. Mientras hablaban, recordó vagamente que tenía un hermano. Esperando obtener una pista, le preguntó por él y si todavía tenía el mismo trabajo. «Oh, él está bien —dijo ella—, y sigue siendo rey».